AMORTAJADA
Deja que el viento,
roce imperceptible
apenas tus cortinas,
o empuje tu ventana
para penetrarte
como un rayo de sol
¡Oh carne! ¡Oh alma!
¡Oh copa rebosante
de volutas y de fuego,
de días ardidos
y noches taladradas,
de sábanas que evocan
en su idioma de susurros
tu rostro sin nombre
y tus contornos
de amortajada!
Carlos Barrales O
No hay comentarios:
Publicar un comentario